miércoles, 19 de noviembre de 2008

Sevilla vuelve a ser la capital del cine europeo por una semana


Con cuatro secciones a concurso (Sección oficial, Eurimages, EFA y Panorama Andaluz) y un repaso a las filmografías de David Lean y José Luís Borau, amén de un recorrido por el mejor cine danés de los últimos tiempos y un ciclo de cine de terror, el pasado 7 de noviembre a las 9 de la noche comenzó oficialmente la quinta edición del Festival de Cine Europeo de Sevilla con una gala de inauguración en el teatro Lope de Vega en la que se proyectó el esperado film italiano Gomorra, de Mateo Garrone basado en la novela homónima de Roberto Saviano y que se alzó con el premio del jurado en el pasado festival de Cannes. Pero en realidad el festival había comenzado unas horas antes con el pase de prensa a media tarde de la mencionada Gomorra y la masiva afluencia de medios a la rueda de prensa posterior para poder ver al autor del libro original rodeado por unas inmensas medidas de seguridad (ya que se haya amenazado de muerte por la verdadera Camorra napolitana tras la publicación de Gomorra). La película agradó a la mayoría de la crítica especializada lo que provocó que la rueda de prensa fuese tremendamente interesante, girando alrededor de las dificultades de adaptar un libro de las características de Gomorra. Sin duda, con esta película se ha decidido arrancar de forma fuerte la sección oficial del festival, sin duda la más importante de todas.


El sábado la rumana Boggie de Radu Muntean dejó bastante fríos a todos aquellos que decidieran darle una oportunidad, pero la tediosidad de su ritmo y su trama con muy pocos personajes y mal dibujados hacían presagiar desde ese momento que no era una competidora a la altura de Gomorra u otras películas que aún estaban por llegar. El gran estreno de aquel día fue, sin duda, la francesa Bienvenidos al Norte, de Dany Boon: una comedia agridulce acerca de un cartero que finge ser discapacitado para conseguir el traslado de trabajo a una apacible localidad en la costa mediterránea francesa.


El domingo se acumulaban los estrenos con tres candidatas a llevarse el giraldillo de oro: la rusa The Hollow, la irlandesa Delta y la islandesa/francesa Back Soon. El filme ruso impresiona gracias a su interesante punto de partida, un hombre intenta escapar de un “hueco” donde muere gente, pero se viene abajo en su segunda mitad haciendo perder a uno todo el interés. Delta, la flamante ganadora del premio de la crítica en Cannes, cuenta el regreso al hogar familiar de un joven, que se encuentra con el descubrimiento de una hermana a la que no conoce y con la que comienza a mantener una intensa relación. Sin embargo, las cintas que más impresionó aquel día fueron Back Soon y la italiana Il Divo dentro de la sección Eurimages. La primera contaba la historia de una madre que vive de la venta de marihuana para subsistir y la segunda es un irónico biopic sobre el ex primer ministro italiano Giulio Andreotti. Con gran acogida de crítica y todas las entradas vendidas, sin duda fueron los grandes estrenos del fin de semana junto a Gomorra.


Tras los tres intensos primeros días de Festival, el lunes se presentó la germano finlandesa Black Ice dentro de la Sección Oficial del festival, dejando un ambiente tibio entre la crítica que se acercó al Lope de Vega para ver el film. La historia de una mujer que al descubrir la infidelidad de su marido, decide hacerse amiga de su amante mientras planea una venganza contra su cónyuge es una historia que resultaba demasiado familiar entre los cinéfilos como para que la película impactase. Sin duda el gran estreno de aquel día fue la impresionante cinta rusa Mongol, la historia de Gengis Khan antes de ser Khan del futuro imperio Mongol, contada con unos medios, una fotografía y un ritmo envidiable. Muchas superproducciones hollywoodienses deberían fijarse en este film para devolver la epicidad majestuosa y realista a las superproducciones de época tan cargadas de efectos especiales y acción rápida y enrevesada.


La holandesa Katia´s sister fue el plato fuerte del martes, presentando la historia de una chica cuya madre rusa y su hermana Katya trabajan en el conocido barrio rojo de Ámsterdam. Sin embargo el film más impactante fue La Batalla de Hadiza, una producción británica que recreaba de una manera ciertamente estereotipada, aunque muy dura, la incursión llevada por el ejército norteamericano en la ciudad iraquí de Hadiza, tras un ataque bomba en el que murió un militar, matando a más de 20 civiles a sangre fría. Perfecta recreación aunque los diálogos inciden bastante en los manidos tópicos de la guerra santa, el excesivo patriotismo americano y la inutilidad de las operaciones militares americanas en la zona.


El miércoles a primera hora, el director israelí David Wollach presentó My Father, my lord. Un film bastante aséptico, con escasez de medios y unas interpretaciones bastante parcas pero que sin embargo gustó a la crítica al contar con sencillez la historia de un niño que se rebela ante la excesiva religiosidad de su padre judío. Pero la francesa Espías en la Sombra consiguió cautivar al público al contar las hazañas bélicas verídicas de un grupo de cuatro mujeres que debieron infiltrarse en un hospital nazi para evitar que éstos le sacasen la información a un prisionero sobre el desembarco de Normandía.


El jueves se presentaron otras tres películas a la sección oficial del festival: la alemana En el séptimo cielo, la croata Three stories about sleeplessness y la polaca Katyn. Sin duda el film de Andrej Wajda (homenajeado durante esta edición del festival de Sevilla, recibiendo un premio especial por toda su carrera) que trata sobre la terrible matanza de oficiales del ejército polaco durante la segunda guerra mundial. Junto con Espías en la Oscuridad, es el segundo film sobre la II Guerra Mundial que compite en la Sección Oficial pero, a diferencia del film francés dirigido por Jean-Paul Salomé, que se centraba más en la aventura; Wajda opta por la austeridad y seriedad en lo narrado para incitar más a la reflexión que al espectáculo bélico.


El viernes fue el último día de estrenos antes de la gran noche de clausura del día siguiente. A destacar el estreno de Robert Zimmerman: is Tangled up in love del alemán Leander Haußmann y la británica Un gran día para ellas de Bharat Nalluri. Dos comedias románticas para la última jornada de estrenos de la sección oficial, aunque el estreno británico cuenta con la ventaja de contar con la excepcional actriz americana Frances McDormand y con Amy Adams, dos caras familiares que sin duda atraían mucho más publico que la simpática cinta alemana, aunque las dos son perfectos ejemplos de buen cine.


El sábado, en la sala de prensa de El Casino de la exposición de Sevilla se dio a conocer como flamante ganadora del giraldillo de oro a la gran sorpresa del festival, la irreverente comedia francoislandesa Back Soon, de Sólveig Anspach, mientras que el giraldillo de plata ha sido para la holandesa Katya´s Sister, de Mijke de Jong Por otro lado, la favorita para el principal galardón, Gomorra, obtuvo finalmente el Premio Especial del Jurado y, la también italiana, Il Divo se hizo con el premio Eurimages. Poco después, la gala de clausura despidió el festival hasta el año próximo.


Sin duda ha sido una semana intensa para el cine europeo aquí en Sevilla, aunque el nivel general de las películas a concurso ha sido más que aceptable, no ha llegado a alcanzar al de otras ediciones anteriores. Por otro lado, la excesiva cantidad de estrenos hacía imposible seguir todas las secciones a concurso. Aún así, esperemos que para el año que viene podamos disfrutar de otra semana de buen cine europeo aquí en Sevilla.

1 comentario:

Juan Blanco dijo...

Genial crónica. Se lee de un tirón. ¡Gracias por mantenernos informados, genial Samgarsan!

La construcción de la primera oración es demasiado extensa quizá, pero el resto del texto cuenta con una retórica envidiable. Eso, y que he sonreído al leer el nombre de Frances McDormand.

Tanto cine en una semana no puede ser bueno. Debería existir una sección permanente a concurso, a lo largo de todo el año. Así, quizá...